Esta bestia inspirada en los tiburones es tan grande que los pasajeros necesitarían un carrito de golf para explorarla.
Su precio, estimado en más de mil millones de dólares, es tan aterrador como sus ventanas en forma de dientes.
Apodado "Outrageous" por sus salvajes proporciones y diseño, este superyate con forma de tiburón es obra del estudio de diseño italiano Lazzarini.
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Fundado por Pierpaolo Lazzarini, el estudio ha llamado la atención por conceptualizar y diseñar embarcaciones innovadoras que se niegan a conformarse.
En cambio, son famosos por sus diseños visualmente sorprendentes y originales.
Entre ellos figuran el yate saudí con forma de tortuga, de 8.000 millones de dólares, que sería una ciudad flotante, un superyate volador propulsado por helio y un superyate "volador".
El diseño aerodinámico y aerodinámico de Outrageous se inspira en un tiburón martillo.
Esta inspiración se refleja en las ventanas que recorren toda la eslora del barco y representan los dientes.
Una segunda capa de vidrio refleja las branquias del tiburón.
Con 322 m de eslora, eclipsaría al yate Koru de Jeff Bezos.
El superyate tiene una enorme cubierta superior que cuelga sobre la proa.
Esta silueta es un guiño a la característica forma de la cabeza de su musa acuática.
Esta bestia también está pintada de gris para imitar más fielmente a su inspirador depredador.
La nave cuenta con un helipuerto doble para que sus adinerados huéspedes puedan llegar y salir sin problemas en convoy.
Cuando no se utiliza, el helipuerto puede replegarse para dejar a la vista el interior del yate.
También hay cinco piscinas, paneles solares, un amplio espacio de cubierta para descansar y espacio para varias embarcaciones auxiliares en popa, además de mucho más por explorar.
dice Lazzarini: "En esta fase, el Outrageous es sólo un concepto, sin embargo, una estimación en el coste de producción para un cliente debería rondar los 860 millones de libras".